Charles S. Peirce en Berlín



Primera estancia (finales de julio - 10 agosto de 1870)



Eduard Gaertner, Vista de la Ópera y de Unter den Linden, Berlín, 1845
[Fuente: Museo Thyssen]

 

Charles S. Peirce visitó por primera vez Berlín a primeros de agosto de 1870. Tal como describe en su carta del 30 de julio a su hermano Jem, que se había quedado en Londres, había hecho el viaje en tren desde Rotterdam a Berlín. Probablemente a causa de la Guerra Franco-Prusiana que acababa de estallar los trenes sufrían grandes retrasos y el viaje le costó tres días. Puede verse el trazado de las líneas de ferrocarril en 1870 que unían Rotterdam, Berlín, Dresde y Praga.


Como su cuñada Amy Fay estaba estudiando música en Berlín, Charles Peirce debió de alojarse con ella, según describe Amy en su carta a Zina (6 de agosto de 1870, Cf. Amy Fay Papers; N. P. Atkinson, An Examination of the Life and Thought of Zina Fay Peirce, An American Reformer and Feminist, Ph. D, Ball State University, Indiana, 1983, p. 123). Amy debió de ser su cicerone en Berlín y le acompañaría después a Dresde. Merece la pena transcribir sus impresiones de Berlín en esta primera carta:

Berlín es un lugar horroroso. Los peores olores de Londres son los más dulces perfumes aquí, al estar todas las alcantarillas abiertas. La arquitectura y la escultura tienen una apariencia muy adornada y artificial, generalmente imitaciones del estilo clásico y no tienen ningún efecto real, incluso aunque debas reconocer que es bonito. Lo más bonito es la Victoria sobre la Puerta de Brandenburgo, que hace el efecto de un pequeño bronce. El artista no ha sacado ninguna ventaja del gran tamaño para producir un efecto particular de grandeza o sublimidad. Unter den Linden tiene bastante viveza, pero los tilos son absurdos disparates. De forma general la arquitectura de Berlín parece mejor en fotografía que en la realidad. El Tiergarten es ciertamente encantador y me gusta el sistema alemán de comidas, la cocina y la manera de comer —quiero decir al aire libre. Una comida aquí cuesta la quinta parte del precio de lo mismo en Londres. Pero dan cinco veces más. Tengo una habitación parecida a la de casa de Mrs. Bishop [en la que se había alojado en Londres con su hermano Jem] por 10 groschen —un chelín al día en lugar de cuatro. El servicio y la luz creo que por 2 groschen en lugar de un chelín (=10 groschen). Es así con muchas cosas. Muchas cosas te parecerían baratas y sucias, y unas pocas cosas, como el periódico, cuestan más que en Londres. Los cigarros cuestan una quinta parte de lo que cuestan allí pero no tienen aquí la misma calidad. Antes de marcharme compré un baúl como el tuyo nuevo pero no tan bueno por cuatro libras

Doce días después, el 11 de agosto, ya desde Dresde escribe de nuevo a su hermano:

Sin duda Berlín no está muy de moda en verano. Sus olores son una experiencia única en la vida. Pero el Tiergarten es muy bonito y creo que Sans Souci y Potsdam en general no podrían ser superados. No puedo creer que Versalles tenga más encanto, aunque por supuesto sus fuentes, etc. a su modo no tengan paralelo. Pero sólo vi Sans Souci bajo la lluvia y apenas pude echar un vistazo a las bellezas de los jardines. El famoso palacio de Sans Souci no se enseña a los visitantes porque la reina viuda, una vieja dama en declive de creencia luterana, ocupa ahora los apartamentos de Frederick. Está ahí singularmente fuera de lugar, lo mires como lo mires. El Neue Palace, construido por Frederick alrededor de 1760, está bien y en algunos lugares tiene un esplendor peculiar. Un gran recibidor hecho de conchas y minerales, algunos de ellos preciosos y todos brillando, fue como hacer realidad uno de los extraordinarios palacios que en el teatro sirven como residencia de Aladino, etc. etc. Tuve un tiempo bastante agradable en Berlín, pero me pareció poca cosa. Amy, a quien leo esto mientras escribo, sugiere que la calle Bellevue es inigualable. Eso es verdad. Aunque esa calle sugiere que pueden existir barrios y algunas cosas mucho más refinadas, aunque nada en una ciudad tan bello como el campo, ni nada en el campo tan lleno de animación, etc., y en breve tan parecido a la ciudad. La calle Linden es también bella y realmente insuperable, pero los Linden son meros disparates. El hecho es que les mata la ausencia de Reterader [retretes], que el rey no quiere ver ahí. En conjunto no iría a Berlín excepto para ver allí a tus amigos.

El rey Guillermo quiso vivir toda su vida en un pequeño palacio, construido en 1834, en la avenida Unter den Linden, que —según describe la crónica de Harold Frederic en el New York Times, 2 febrero 1890— "estaba pegado a la acera y parecía más un banco o una biblioteca pública que un palacio". Los aposentos del rey tenían las ventanas junto a la calle y a ellas se asomaba todos los días a la 1 para ver el paso de la guardia, mientras una muchedumbre de berlineses y de extranjeros se congregaba regularmente para verle.

 

 

Peirce califica los tilos de "disparatados" [humbugs] aquí y en su carta anterior. Dinda Gorlée y Franz Heukamp han sugerido que Peirce quería emplear la palabra alemana "Retirade" [retretes] en lugar de "Reterader", que quizás el rey habría hecho quitar. Puede verse una foto de un "Retirade" de 1850.

En el Museo Thyssen-Bornemisza hay un cuadro de Adolph Menzel (que puede verse a la derecha) en el que describe la salida del rey Guillermo I el 31 de julio de 1870 para unirse a su ejército.

 

En cartas posteriores volverá Peirce a recordar el mal olor de Berlín (4 de septiembre de 1870) y el calor sofocante en esta época del año (22 de septiembre de 1870).



Mapa de Berlín hacia 1870


En el MS 1560a en el que Peirce sugiere ciudades y alojamientos para un posible viaje por Europa, se refleja bien su experiencia de la estancia en Berlín. Reproducimos aquí esa información con su traducción castellana y algunos enlaces:



Berlín. Los hoteles de Unter den
Linden
son lugares excelentes de tipo
francés. El Hotel du Nord es el
mejor, creo.
Estuve en el Hotel de France por
un día y lo encontré muy bonito y
razonable.





Comer en Alemania. 1 Levantarse y
tomar café. Lo tomarás mucho
mejor en un Café donde es
mejor y más barato.
2 Desayuno bastante temprano
3 Puedes tomar Bouillon mit Ei
[un caldo] sobre las 11 a.m.
4 Comida a la 1 p.m. Nunca comer más tarde
de las 2 en un verdadero restaurante alemán.
5. Después de comer en Berlín (donde
no hay cafés, por cierto)
puedes ir a una repostería y fumar
y tomar café y un helado.
6. Cena entre las 7 y las 9 p.m.




Pueden hacerse más comidas
si no se consideran éstas suficientes.





El mejor restaurante en Berlín
es Hiller's, en Unter den Linden, sobre
el lado derecho yendo hacia
el Tiergarten. Comida 1 tálero.
Precio enorme para Berlín.






Prueba algunos lugares alemanes del
otro lado. Precios sobre 15 groschen


No dejes de ir al excelente
lugar para comer en el sótano del
ayuntamiento. Tienen buena cerveza aquí.
Es un curioso lugar, que merece
una visita.




Para la mejor cerveza en Alemania ve
a una Brauerei [destilería]


En Berlín, no dejes de
dedicar un día a Potsdam. También
ve a Charlottenburg.


Peirce abandonó Berlín el día 10 de agosto, pero a lo largo de su vida volverá en diversas ocasiones a esta ciudad.

 

Segunda estancia (2 de junio 1875-7 de julio 1875)

En su segundo viaje por Europa, Charles S. Peirce -acompañado de su esposa Zina- llegaron a Hamburgo el 27 de mayo de 1875. Allí Peirce fue de inmediato a la empresa Repsold, donde le tenían preparado el péndulo reversible que había encargado años antes para el U. S. Coast Survey. Después de tres días de examinarlo lo pagó el día 31 de mayo y se encaminó a Berlín para hacer las primeras gestiones.


La Kaisergalerie en la Friedrichstrasse, Berlín, 1875




Observatorio de Berlín
[Fuente: Grabado de Ernest Grünewald, 1835]

En Berlín se encontraron con la hermana de Zina, Amy Fay que estudiaba música con Ludwig Deppe y había dado un importante concierto días antes en Frankfurt, que Amy describe en su carta del 18 de mayo. En la compilación de las cartas de Amy, Zina escribirá:

Dos semanas después del concierto, el pariente [ella misma] a quien fueron escritas la mayor parte de las anteriores cartas, se reunió con la autora en Berlín y la correspondencia llegó a su fin. En el siguiente septiembre, después de una ausencia de seis años, mi hermana volvió a casa [p. 351].

Amy se alojaba, junto a un grupo de estudiantes latinoamericanos en la American Boarding House en el nº 15 de la Tauben Strasse (en la actualidad esta calle se ha reconstruido por completo con edificios modernos). Según los datos disponibles, de junio a agosto Zina permaneció en Berlín, incluyendo una visita a Liszt, antiguo profesor de Amy, en Weimar en agosto. No tenemos datos de dónde se alojaron los Peirce en Berlín ni qué relaciones sociales mantuvieron. Probablemente tuvieron algún trato con Tom Burgess (1842-1912), pues cuando Zina no sigue a Peirce a Suiza, Charles escribe a su madre: "Creo que está disfrutando mucho la compañía de Tom Burgess en Berlín" (carta del 7 de agosto de 1875).

Peirce se encontró el 3 de junio con el General Johann Jacob Baeyer del Real Instituto Geodésico Prusiano, quien le indicó que el soporte del péndulo de Repsold causaba una fuente de error en los resultados. Se reunió con el Profesor Förster, director del Observatorio de Berlín, para pedirle que le permitiera hacer las determinaciones gravimétricas en aquel edificio. En el informe oficial del Superintendente del año 1876, p. 7 (y HP 1, 23) se describe sucintamente su actividad:

Se creyó deseable hacer una cuidadosa comparación del péndulo reversible americano con el de Prusia. El famoso geodesta, teniente general Dr. Baeyer, director de la Royal Prusian Survey, quien promovió las operaciones del asistente Peirce de la manera más satisfactoria durante su estancia en el continente, puso de inmediato el instrumento prusiano a su disposición, y la escala métrica de ese aparato, que ya había sido cuidadosamente comparada con el metro estándar prusiano a diferentes temperaturas por el Prof. Förster, fue sometida a cincuenta series independientes de comparaciones con la escala similar del estándar americano por el asistente Peirce. Estas operaciones, que tuvieron un resultado muy satisfactorio, duraron hasta el 7 de julio.

Los contactos científicos de Charles S. Peirce en Berlín, además del General Baeyer y de Foerster, ya mencionados, debieron de ser el profesor Moritz Sadebeck y Hermann Carl Vogel, director del Instituto de Astrofísica de Potsdam, pues en mayo de 1878 cuando se publica  Photometric Researches son los cuatro nombres de científicos de Berlín a los que Peirce desea que se envíe su obra.

En julio Charles marcharía a Ginebra para proseguir sus investigaciones gravimétricas, mientras que Zina regresaría en septiembre a Cambridge, MA, junto con su hermana Amy, aparentemente por motivos de salud. [Fuentes: McCarthy, Margaret William, Amy Fay. America's Notable Woman of Music, Harmonie Park Press, Michigan, 1995, p. 52; N. P. Atkinson, An Examination of the Life and Thought of Zina Fay Peirce. An American Reformer and Feminist. Ph. D., Ball State University, Muncie, IN: University Microfilms International, 1983, pp. 140-141].


Tercera estancia (marzo-junio 1876)

Peirce regresará a Berlín el 5 de marzo de 1876. Del 15 de abril al 12 de junio oscilará su péndulo en la gran sala de comparación del Imperial Eichungsamt; una estación muy próxima a la de Bessel, pero tres metros más alta. La estación era adecuada en relación con su solidez y estabilidad, pero inadecuada a causa de los cambios de temperatura [Fuente: "Measurements of Gravity at Initial Stations in America and Europe", Coast Survey Report 1876, 204]. Disponemos del "Cuaderno de Berlín: observaciones pendulares. Medición de escalas" (WMS 319) y del certificado expedido el 12 de junio por Wilhelm Julius Föerster.

Transcribimos lo que escribe a su madre sobre su modesta vida social en Berlín en la carta del 9 de abril:

Te gustará saber a quién veo aquí. Primero están el viejo General Baeyer y la srta. Baeyer. Adoro al General Baeyer. Es un viejo muchacho maravilloso de cerca de 80. Ahora está refrescando su francés (me parece que últimamente ha estado más en comunicación con los franceses) y todas las noches aprende una lista de palabras. Es un hombre de mucha fuerza y tiene una cierta amabilidad que se irradia de la manera más maravillosa. La señorita Baeyer es tan simpática e instruida como extraña, y tan fea como una joven señorita alemana educada puede posiblemente ser. Me gusta también mucho, pero estoy enamorado del viejo caballero.
Förster, el director del observatorio, es un gran administrador. La cantidad de asuntos de los que es capaz de hacerse cargo es realmente sorprendente. Además de llevar el observatorio, está a cargo del Almanaque Náutico alemán, y también de la oficina de pesos y medidas, que es la tarea más absorbente de las tres. Hay algo extremadamente agradable en él y hace todo lo posible por mí.
(...) Otra conocida agradable es mi profesora de alemán, una joven que me da una hora diaria por una cantidad muy pequeña y que es más guapa de lo que yo suponía que una berlinesa podía ser. Tiene dos amigas inseparables; una es una señora alemana soltera de casi cuarenta, que siempre me resulta interesante. (...). En todo caso hay algo en ella que hace que me guste verla. La tercera joven es inglesa y no me interesa.

 


Historic pre-war photos of German cities

En su carta del 6 de julio de 1876 a Carlile P. Patterson desde Richmond, cerca de Londres, le da estas noticias de su trabajo en Berlín:

En Berlín, el péndulo descansaba sobre un pilar independiente y era absolutamente estable, pero la estancia, sobre la que debo escribir más extensamente en otra ocasión, no tenía ventanas, y tuvo que idearse y desarrollarse un sistema muy complicado de lentes y espejos para darme la luz requerida que procedía de distantes lámparas situadas en unos conductos. El efecto de estos puntos de luz sobre la temperatura era muy malo. Sin embargo, hice todo el esfuerzo posible por reducirlo y emprendí una segunda serie independiente de experimentos con otro plan para evitar ese efecto, y por tanto confío en que los resultados de esa estación sean considerablemente mejores que los de París.
(...)
He hecho durante este año varias mejoras en el arte de oscilar péndulos. El más importante es mi medida de la flexión del soporte, que introduce una corrección muy importante en todos los resultados con los péndulos reversibles Repsold. Al general Baeyer, que está realmente a la cabeza de la geodesia europea, le agradó mucho, y llevó a un grupo grande de científicos a que vieran cómo operaba mi aparato en Berlín".

En esta estancia sufrirá una grave crisis nerviosa. A mediados de junio se traslada de Berlín a Londres donde se reunirá con su esposa Zina y marcharán a Kew, Inglaterra, para proseguir las determinaciones gravimétricas.

 

 



Cuarta estancia (julio 1876)

Según la carta del 12 de julio de 1876 a Benjamin Peirce, Charles S. Peirce hará un viaje breve a Berlín el 13 de julio, probablemente acompañado de Zina, para estar allí unos pocos días y comparar las mediciones que había hecho en Kew con las de Berlín.

Probablemente se entrevistó con el general Baeyer quien se interesó por la posibilidad de medir la gravedad en el Observatorio de Berlín con los péndulos de Kew (Cf. Carta de C. S. Peirce a su padre Benjamin, 29 de julio de 1876, nota 2).

Sabemos que el 27 de julio está de regreso en Londres, pues escribe desde allí a Arthur Searle y a Carlile P. Patterson.


[Fuente: Universidad Bielefeld]

Quinta estancia (octubre 1877)

En su tercer viaje a Europa (13 de septiembre de 1877-18 de noviembre de 1877) Charles S. Peirce regresará de nuevo a Alemania para tomar parte en el congreso de la Asociación Internacional de Geodesia en Stuttgart del 27 de septiembre al 2 de octubre. En su carta del 10 de septiembre a su madre, Charles S. Peirce da como alojamiento en Berlín el Markgraf's Hôtel de l'Europe:


[Fuente: A Handbook for Travellers in Holland and Belgium]


En mayo de 2018 Tullio Viola y Jaime Nubiola recorrieron la Tauben Strasse donde se encontraba este hotel. Probablemente estaba situado en la confluencia de las calles Markgrafenstrasse y Taubenstrasse. Pueden verse aquí debajo una ilustración de la época y una fotografía actual con la vista que tendría Charles S. Peirce desde el Hotel de l'Europe:



En su carta del 2 de noviembre de 1877 a su madre resumiendo los hitos principales del viaje, Charles S. Peirce indica: "Te escribí una larga e interesante carta desde Leipzig, pero por hacerlo llegué tarde al tren y lo perdí. Eché la carta en mi bolsa y en Berlín se volcó un tintero y la carta quedó del todo ilegible". Y unos párrafos más adelante añade:

De Leipzig a Berlín. Plantamour había llegado antes que yo y estaba llevando a cabo sus experimentos. Comparé de nuevo mi estándar con el del péndulo prusiano y encontré un ligero cambio desde 1875 de 1/12000 de una pulgada. No mucho, pero algo. Encontré Berlín muy parecida. Están construyendo sin embargo un observatorio impresionante en Potsdam, que fui a  ver con Förster y Plantamour. Es algo inmenso. Cada observador tiene una casa separada.

En los National Archives se conserva el Cuaderno de Berlín. Comparaciones de los péndulos americano y prusiano (WMS 317) al que hace mención en esta carta a su madre.


Bibliografía

-S. Freyberg, "Peirce in Germany", European Journal of Pragmatism and American Philosophy 6/1 (2014).

-E. Walther, "Die dritte Europareise von Charles S. Peirce zur Geodätischen Konferenz in Stuttgart im Herbst 1877", Semiosis 30. Internationale Zeitschrift für Semiotik und Äesthetik 8. Jahrgang, Heft 2, 1983, 57-65


Proyecto de Investigación "Correspondencia europea de Charles S. Peirce: creatividad y cooperación científica" (Universidad de Navarra 2007-09)

Fecha del documento: 19 de febrero 2008
Última actualización: 13 de diciembre 2018
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