Pero se vengó en seguida, y dio de nuevo en clamar.
En la Catedral se entraba, se entraba por Puerta Real.
Dos órganos tiene el coro; los dos hizo vocear;
Doce campanas, las torres, las doce hizo loquear;
De la banda del poniente, hizo el cielo llamear;
Y así, vestido de púrpura, voló de aquí para allá.