volver
Eugenio d'Ors
presentación | vida | obra | pseudónimos | retratos y caricaturas | galeria fotográfica |dibujos |entrevistas| enlaces    
SERIES DE PRENSA DEL GLOSARIO
GLOSAS en La Vanguardia
Eugenio d'ORS, «Glosas de La Vanguardia», La Vanguardia Española, Barcelona (1-II-1940—14-IV-1940)       
Reflexiones sobre la vanguardia
(La Vanguardia, 7-II-1940, p. 1; recogido, con el título «La vanguardia», en Nuevo Glosario, vol. III, pp. 734-736)
Parecerá imposible; pero yo he tenido el gusto de conocer a la señora Cleo de Mérode, y no más lejos que en 1935. Porque la ilustre dama —dama, a pesar de las confusiones y síntesis iconográficas de nuestras antiguas cajas de fósforos— vive hoy y en retiro, si discreto, no hermético en modo alguno. Visitaba justamente, en la coyuntura, una exposición de estilos y recuerdos del «Fin-de-Siglo», del fin del siglo XIX, instalada en París, en el Museo de Artes decorativas de Pavillon(1) Marsan. Ya puede pensarse que, entre lo más reído en la exposición, se encontraba una vitrina con retratos fotográficos de las celebridades de la hora. Lo pomposo y extravagante del atuendo con que se presentaban aquellas beldades justificaba tales risas entre sus nietos. El retrato de la condesa de Mérode, empero, no traía hilaridad, sino encanto. A nuestra felicitación por tal motivo, ella hubo de contestar señalando el peinado, traje y atavío que llevaba; iguales en todo a los que la fotografía refería al 98.
Situábanse dichos peinado, traje y atavío entre los que, en el momento a que me refiero, aparecían como las últimas adquisiciones de la elegancia. Y colocábanse con naturalidad a la vanguardia de ella. Porque conviene no olvidar cómo el concepto de vanguardia difiere de contenido según que se predique de un grupo humano en andanza o de un grupo humano en asiento. En el primer caso, la dirección del movimiento define la primacía. Cuando se trata, no de marcha sino de trabajo, todo el contorno del aplicado y estable grupo puede ser vanguardia; y, lo esencial para ésta, no la orientación, sino precisamente la «guardia»; quiere decir, la actitud despierta y vigilante.
Pronto está dicho ser Pedro Nolasco Pi un «carlista de vanguardia», o Crescencio Martínez del Parral, un «intelectual vanguardista»: falta saber si caminan en una evolución o si quieren instalarse en lo eterno. El vanguardismo de Crescencio —es una hipótesis— tendrá que condicionarse, rectificándose a cada paso por la posición de quienes le siguen, con la obligación de llevar continuamente la ultranza más lejos. Mientras tanto, el vanguardismo de Pedro Nolasco, podrá afirmarse más cada día en su posición. Y echar en ella raíces, a la manera del árbol de su apellido.
No es únicamente la posibilidad de que lo más viejo se torne, con el tiempo y el mudar de las cosas, lo más nuevo; así, aquel Sombrero del señor Cura, del inolvidable y olvidado Clarín; aquel sombrero que, a fuerza de no ser mudado, impasible a las veleidades del gusto ambiente, acabó por estar a la última moda: aquí lo que triunfa es todavía el relativismo. Pero hay también valores absolutos, que no pasan de moda, justamente porque nunca han estado ni estarán dentro de ella y ante los cuales la jerarquía se establece tan sólo por razón de valentía, fidelidad y pureza en la manera de servirlos(2). Vanguardia convendrá llamar a este servicio; depurada vanguardia para la conservación, si hay otra para la evolución. Vanguardia que protege el útil fuego, encendido en hogar, más bien que propagar el destructor incendio, prendido en la salvaje manigua.
Los que huyen de una quema tuvieron, tienen, sin duda, una vanguardia. Pero quienes forjan a calor de fragua armas de combate o enseres de trabajo, llámanse, en consideración de los mejores entre ellos, vanguardia también.

(1) Pavillon] Pabellón Nuevo Glosario.
(2) servirlos] servirnos Nuevo Glosario.

Diseño y mantenimiento de la página: Pía d'Ors
Última actualización: 25 de marzo de 2009