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Desarrollo científico y musicoterapia: balance y perspectivas | 2

En los inicios del siglo XIX descubrimos una continuidad con el periodo anterior. Los autores españoles, médicos o músicos, prolongan la tradición. Sus escritos concuerdan con las características que vimos en el siglo XVIII, lo que parece un rasgo observado también en otros países. En el ámbito médico encontramos un ejemplo en los escritos del doctor Antonio Ballano.

Se ha dicho que el siglo XIX es el siglo de la Historia. También lo es en lo musical. Las obras de los autores españoles: Eslava y Barbieri, y más tarde Pedrell, muestran esa dedicación. Las tendencias sociológicas, desarrolladas especialmente desde la segunda mitad del siglo XIX, favorecieron la investigación en el folklore, un campo importante como fuente del conocimiento musical y etnográfico.

Enfermedad mental y musicoterapia

El desarrollo de la Medicina como ciencia experimental llevará al estudio de los órganos de los sentidos y de la audición.

Además, en esta época aparece una nueva visión de la enfermedad psiquiátrica en la que tuvo cabida el carácter terapéutico de la música.

Esquirol (1772-1840), siendo director del asilo “Maison Royal de Charenton” recomendó la aplicación de la música en el tratamiento de las enfermedades mentales. Tenía que ser interpretada con pocos instrumentos y los intérpretes estar escondidos, de forma que sólo se percibiera el sonido. Alemania fue el núcleo principal, no sólo de la música romántica, sino también de las especulaciones sobre la musicoterapia para las afecciones mentales y de su puesta en práctica.

Un ejemplo del uso de la música es el artículo publicitario del asilo Illenau de Baden que decía: “música y canto son componentes indispensables de la vida en Illenau. Estas artes son percibidas como instrumentos terapéuticos restauradores; los antiguos asilados no pueden volver la mirada atrás sin recordar las interpretaciones musicales que tenían lugar en el vestíbulo principal, en las habitaciones de día o en la zona de asilo”. Y se conserva la carta de una antigua paciente que escribe a Illenau pidiendo el envío de tres canciones porque las asocia a la recuperación de la salud.

En España, el doctor Rafael Rodríguez Méndez (1845-1919), catedrático de Higiene, aplicó la música en el manicomio de Sant Boi de Llobregat. Era partidario del llamado “Tratamiento Moral” instaurado por Pinel, y explicaba que “Uno de primeros pasos en la dirección del manicomio fue el reorganizar la orquesta (toda compuesta de enfermos), que ensaya varias horas al día y que durante el paseo colectivo de los pacientes por los jardines toca piezas distintas, valiéndose de los aires nacionales en los casos de profunda melancolía, especialmente con los gallegos”.

Epílogo

Cada vez es mayor la investigación de los efectos de la música y su aplicación en la terapéutica, así como el número de enfermedades en las que se utiliza. También son frecuentes los estudios sobre la historia de la musicoterapia.

La Musicoterapia ha sido reconocida como profesión en numerosos países. En España está aumentando el número de grupos que utilizan la música en la terapia ocupacional y física. Prueba de ello es la organización de seminarios y programas de formación; la organización de nuevas Asociaciones de Musicoterapia; y, sobre todo, su aplicación a programas de educación especial, atención de ancianos con demencias, enfermedad de Alzheimer, rehabilitación neurológica y psiquiatría.

Hemos observado que no hay solución de continuidad en el uso de este recurso desde la medicina pretécnica a la medicina científica. Lo que ha habido ha sido una evolución y una reinterpretación de su significado. Esta Exposición muestra que la moderna musicoterapia necesita de su historia para llegar a adquirir sentido e identidad.

Universidad de Navarra


Textos: Pilar León Sanz
Música: Charo Lanz
Fotografías y diseño: María Calonge e Inmaculada Pérez
Noviembre 2015

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